Los brackets cerámicos contaban con infinidad de características determinantes para su elección. Gracias a su apariencia más fácil de disimular han sido durante mucho tiempo la opción preferida, especialmente por aquellas personas que se deciden a utilizar un dispositivo corrector en su edad adulta, ya sea para la alineación de los dientes, por estética o salud.
Ventajas de los brackets de cerámica
La principal ventaja con la que cuenta este tipo de tratamiento es el material que va colocado sobre el diente, es que resulta muy sencillo que pase desapercibido.
Al contrario que los aparatos fabricados con materiales metálicos, la porcelana gracias a su color más similar al de la dentina, consigue ocultarse con mayor efectividad. Es por ello que, los adultos, más conscientes sobre su apariencia, prefieren utilizar un dispositivo con el que poder sacarse fotografías sin que se inmortalice también su corrector dental.
Asimismo, otras ventajas de este material incluyen su gran resistencia, ya que de forma contraria a la creencia más popular, una ortodoncia cerámica es realmente fuerte y no tiene mayores posibilidades de romperse que otros materiales disponibles en el mercado, como pueden ser los de metal.
Es necesario mencionar uno de los puntos clave por el que muchas personas se deciden por este sistema, y es que a menudo es el más recomendado para personas con encías sensibles, ya que este material resulta más cómodo y consigue irritar mucho menos la raíz de los dientes.
Desventajas de la ortodoncia cerámica
A pesar de que estos tratamientos cuentan algunas ventajas, los brackets de cerámica también tienen algunos inconvenientes que es recomendable tener en cuenta antes de hacer la elección entre un material u otro, ya que a pesar de que nuestro ortodoncista nos puede aconsejar, la decisión final será nuestra.
Para empezar, un dato importante a tener en cuenta, es que la cerámica tiene un precio ligeramente superior al metal, además aún teniendo en cuenta que no son tan visibles como otros materiales, será necesario utilizarlos durante una mayor cantidad de tiempo, llegando incluso a prolongarse hasta algunos meses más.
De igual forma y manteniéndonos en el punto de vista estético, debemos tener en cuenta que en fotografías o desde una distancia prudente será mucho más fácil ocultarlos que los tradicionales, pero a cortas distancias serán igualmente sencillo percatarse de ellos, ya que tienen unas dimensiones un poco mayores, además de que estos irán unidos por un pequeño hilo metálico.
Por otra parte, es necesario utilizar pequeñas gomas elásticas que sujetan el arco y los brackets. Esto quiere decir que, a pesar de que existen en multitud de colores, incluyendo el blanco o transparente, pasado el tiempo se irán manchando quitando su efectividad estética.
Brackets cerámicos o de plástico a diferencia del zafiro tienden a cambiar su coloración o teñirse con el paso del tiempo.
Los brackets cerámicos actualmente desuso
Es por todo esto, que a pesar de que disfrutaron de un gran apogeo, en la actualidad los brackets cerámicos se encuentran en desuso, aumentando la demanda de otros materiales como el zafiro, el cual es totalmente transparente y de mayor calidad.
Otras alternativas a los brackets de cerámica
En nuestra clínica dental de Madrid, disponemos de alternativas y diferentes tipos de ortodoncia invisible. Como puede ser la técnica con brackets linguales o la ortodoncia Invisalign. Estos últimos además de comodidad ayudará al paciente a mantener una correcta higiene dental durante el tratamiento.
En la primera visita al ortodoncista el paciente será aconsejado de los diferentes tipos de tratamientos dentales y el más adecuado para cada caso.